El líder de la mayoría republicana en el Senado estadounidense, Mitch McConnell, dijo que el texto probablemente se votará en 2020, después de un probable juicio político en enero del presidente Donald Trump, quien se espera que este mes sea acusado por la Cámara de Representantes.
AFP|Foto: Reuters|El Economista|10 de diciembre de 2019, 16:14. El nuevo Tratado Comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC) no será ratificado por el Congreso estadounidense hasta principios de 2020, dijo el líder de la mayoría republicana en el Senado estadounidense.
Mitch McConnell dijo que el texto modificado probablemente se votará en el Senado el próximo año, después de un probable juicio político en enero del presidente Donald Trump, quien se espera que este mes sea acusado por la Cámara de Representantes.
«No nos ocuparemos del T-MEC en el Senado entre ahora y el final de la próxima semana» cuando el Congreso concluya su período de sesiones de 2019, dijo McConnell a periodistas.
«Con toda probabilidad (la ratificación del T-MEC) deberá ocurrir después de que concluya el juicio en el Senado», afirmó McConnell.
Los demócratas que controlan la Cámara de Representantes anunciaron el martes 10 de diciembre un acuerdo con la Casa Blanca sobre los ajustes solicitados al texto del T-MEC sellado hace un año y dijeron que esperan una pronta ratificación del acuerdo.
Se espera que la Cámara baja vote la próxima semana el nuevo documento, que actualiza el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), vigente desde 1994.
El nuevo pacto endurece notablemente las disposiciones de cumplimiento de las leyes laborales que estaban en el acuerdo original del T-MEC, firmado el 30 de noviembre de 2018 por los tres países y hasta ahora sólo ratificado por el Senado mexicano en junio pasado.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, celebró que su partido ganara concesiones de la Casa Blanca que, según dijo, hicieron que el acuerdo fuera «infinitamente mejor de lo que inicialmente propuso el gobierno».
Eso podría llevar a los republicanos del Senado a hacer una pausa mientras estudian el documento.
«Desde mi perspectiva, no es tan bueno como esperaba», dijo McConnell, sin dar más detalles.
Cualquier acuerdo de comercio internacional en Estados Unidos debe ser aprobado por ambas cámaras del Congreso a través de un proyecto de ley de «implementación», que luego debe ir a la Casa Blanca para ser promulgado por el presidente.