Nadia Altamirano|Noticias|Jue, 09/05/2019 – 09:48. El efecto negativo que ha mantenido el sistema de jubilaciones en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) está por alcanzar el cuarenta por ciento de los 880 millones de pesos que al año se erogan para servicios personales o salarios.
Además de su pensión que le otorga el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un profesor de tiempo completo jubilado puede recibir de la UABJO hasta 53 mil 400 pesos al mes y un trabajador administrativo que se retiró con el nivel más alto hasta 48 mil pesos mensuales.
Son mil 49 trabajadores jubilados contra 3 mil 600 en activo quienes convierten las finanzas de la UABJO en inviables, porque su sistema de jubilaciones no se ha reformado y permite percepciones en el iMSS y la universidad, es decir una doble jubilación.
Se pondrá peor
Para el abogado de la UABJO, Héctor López Sánchez, la situación se vuelve todavía más crítica porque “hay 250 trabajadores en edad de jubilación esperando acceder a este derecho”, de los cuales 170 son académicos y 80 administrativos.
El promedio de jubilación es de 10 mil 736 pesos quincenales, siendo la mayor de 26 mil 700 pesos quincenales para un académico, es decir 53 mil 400 al mes, y la menor, de 940 pesos si al momento de jubilarse sólo tenía asignadas horas clase.
Decisión aplazada
López Sánchez admitió que el sistema de pensiones en la UABJO debió haberse reformado desde hace dos décadas, pero lo han impedido los conflictos, como en el 2006 que se comenzó a definir una propuesta por estudios actuariales pero coincidió con la convulsión político social que vivía la entidad.
Con el ex rector Eduardo Marínez Helmes reiniciaron estudios actuariales que retomó la administración de Eduardo Bautista Martínez porque “el tiempo está sobre nosotros, estamos en una etapa muy crítica por lo que es urgente renovar nuestro sistema de pensiones.
La UABJO y la Universidad Autónoma de Michoacán son las únicas del país que no lo han reestructurado su sistema. Se ha propuesto un reglamento que estima que las jubilaciones se realicen a través de un sistema complementario para constituir un fondo con una aportación de la UABJO equivalente al 20 por ciento del sueldo de los trabajadores, quienes a su vez aportarán el diez por ciento de su salario ya que actualmente no aportan nada, “toda la carga financiera la tiene la universidad”.
Aunque se aprueben reformas al sistema de pensiones, esos 261 millones de pesos que actualmente se erogan al año no se dejarían de aplicar al pago de jubilaciones ya autorizadas. El ahorro se notará un diez años después.
